jueves, 18 de febrero de 2010

El Perú necesita leyes de salud sexual y reproductiva


Los expertos aseguran que el Estado ha descuidado y olvidado a un sector importante de la población, los adolescentes. Y es que hasta el momento ellos no pueden recibir o acceder a información sobre salud sexual y reproductiva. Según las cifras proporcionadas por el Minsa, el total de aborto registrados en el 2008 fue mayor a 8 mil 150. Las mimas, también indican que la muerte materna ha disminuido, excepto en las menores de 19 años. Ante esta problemática, los expertos creen que los gobiernos se han olvidado de los jóvenes. “Nuestros representantes pretenden desconocer que la mayoría de los adolescentes inician su vida sexual entre los 14 y 18 años, los mismos que al no contar con información o un método anticonceptivo, pasarán a incrementar los casos de embarazos no deseados, abortos y muerte maternal en el Perú”, señaló el Dr. Daniel Aspilcueta, Director Ejecutivo de Inppares,Lo preocupante de estas estadísticas es que de la mayoría de adolescentes embarazadas, el 33% sólo tiene Educación primaria, lo que para Aspilcueta significa que sus posibilidades de desarrollo serán casi nulas a lo largo de su vida. Por eso Giovanna Carrillo Zegarra, coordinadora del proyecto voces y rendición de cuentas de Inppares, cree en la importancia y necesidad de una Educación integral en Educación Sexual y Reproductiva.Pero la situación es todavía más alarmante con la existencia de leyes como la 28704, que si bien los protege en caso de violencia sexual, les restringe el derecho de acceder a un método anticonceptivo. “Para cambiar esta realidad es necesario no sólo más compromiso de parte de las autoridades, también más inversión. Hasta el momento, del total invertido en Educación sexual sólo el 12% ha sido inversión peruana, porque el porcentaje restante proviene de ayuda internacional”, indicó Carrillo.Por ello, los expertos finalizaron diciendo que urge la necesidad de implementar políticas públicas que promocionen y permitan a los adolescentes a acceder libremente a la información sexual o métodos anticonceptivos.