31 MAY 2010 SIMPOSIO DE BIOÉTICA Y HUMANIZACIÓN DE LA ASISTENCIA HOSPITALARIABioética y Humanización, espiritualidad de la asistencia hospitalaria, elección de los cuidados paliativos, y la terminalidad de la vida.
Prof. Dr. Roberto M. Cataldi AmatriainFundación Cataldi Amatriain
El 22 de mayo se realizó en el Hospital del Corazón de San Pablo (uno de los hospitales más importantes de Brasil) el “Simposio de Bioética hospitalaria. Humanización de la asistencia hospitalaria”. Las exposiciones y ulteriores discusiones giraron en torno de cuatro ejes temáticos:
- Bioética y Humanización,
- Espiritualidad de la asistencia hospitalaria,
- Elección de los Cuidados Paliativos, y la
-Terminalidad de la vida.
Los Cuidados Paliativos fueron abordados como un problema de Salud Pública, haciendo hincapié que los mismos constituyen un soporte para el paciente pero también para la familia de éste.
En torno a la biografía del enfermo, la asistencia clínica se explicitó bajo cuatro dominios:
-biológico,
-social,
-psicológico y
-espiritual.
Se hizo mención a la historia de estos cuidados en el Siglo XX, especialmente figuras emblemáticas como Cicely Saunders y Elizabeth Kubler Ross.
Los Cuidados Paliativos frente a la incapacidad del enfermo, el impacto del hecho desgraciado en la familia, la prevención del sufrimiento asociado.
En el debate se pusieron de manifiesto distintas posiciones y también algunas confusiones conceptuales: la instrumentación de estos cuidados cuando ya no hay nada para hacer (…), la situación entre curar o cuidar, la incógnita de si estos cuidados deben reservarse exclusivamente para los pacientes terminales, si debe regir como pronóstico una expectativa de vida que no supere los seis meses, la creencia de que estos cuidados deber limitarse a lo que hoy se conoce como sedación terminal.
Quedó en claro la necesidad de que los pacientes terminales sean asistidos por un equipo multidisciplinario para lograr así una asistencia médica adecuada que les permita sobrellevar esta última etapa de la vida en condiciones dignas.
En cuanto al tema de la espiritualidad, se comentó que ya habría sido introducido en la currícula de unas 40 universidades de los Estados Unidos. Pero.
¿puede considerarse a la espiritualidad como sinónimo de religión? Se dijo que el acompañamiento psicológico es más sistemático, no ritual o pastoral.
La atención religiosa del paciente terminal puede estar mediada por un equipo religioso (sacerdote, pastor, rabino, etc.).
Uno de los expositores, el teólogo Ivo Lichtenfels de Frankfurt, sostuvo que en el área religiosa las relaciones suelen ser muy conflictivas, que hay religiosas que se confunden al hacer un trabajo de proselitismo, y que ciertos médicos manifiestan claros escrúpulos para relacionarse con la espiritualidad.
No hay duda que en estas decisiones el médico proyecta su propia biografía y también su propia muerte. Se insistió en que es necesario renunciar a los excesos terapéuticos o abusos, y fundamentalmente, que se acepte la condición humana ante la muerte.
Durante el transcurso del simposio se presentó el Nuevo Código de Ética Médica del Consejo Regional de Medicina del Estado de San Pablo, que entró en vigencia el pasado 3 de abril.
Es de destacar que ésta es la sexta edición del texto revisado después de 22 años de vigencia del código anterior.
Esto dio lugar a que se discutiera sobre la notable diferencia entre el lenguaje médico y el lenguaje jurídico. También se dijo que el respeto del médico por la autonomía del paciente (uno de los principios fundamentales de la Bioética) cuya vida está siendo prolongada contra su voluntad puede interpretarse como homicidio.
Asimismo se hizo mención de que no hay deber jurídico de mantener una vida irrecuperable y, como suele suceder en estos debates, volvió a surgir la colisión entre el concepto de sacralidad de la vida (en cuya defensa es intransigente la Iglesia Católica) y el concepto de calidad de vida de neto corte antropológico.
Al concluir este evento que reunió a un público numeroso de profesionales médicos y no médicos (de diferentes edades) quedó explícito que es mandatario que los profesionales que asistan médicamente a los pacientes considerados terminales se hallen en condiciones de entenderlos.
Comentario del Prof. Dr. Roberto M. Cataldi Amatriain
Profesor Titular de Medicina InternaSecretario General de la Academia Argentina de Ética Médica